Nuestras cordilleras peruanas son una mágico paisaje digno de admirar, sin embargo, conducir sobre ellas a bordo de un camión puede dejar de ser tan placentero, puesto que requiere de mucha destreza y habilidad del conductor, ya que son carreteras sumamente peligrosas tanto para choferes novatos como para experimentados, pues, un mal giro o inclinación inadecuada puede ser el desenlace de un lamentable accidente.

Basándonos en la experiencia de conductores con gran trayectoria en el rubro, hemos recolectado varios tips para manejar por estas zonas:

 

  • Verifica tu camión

 

Incluso si tu viaje no es por las cordilleras, este es el paso número uno que debes cumplir cada vez que emprendes una ruta. Algunas de estas revisiones implican: niveles de líquidos (combustibles y aceites), verificar que no haya ningún tipo de escapes o fugas, inspección de frenos y de llantas.

 

  • Presta atención al combustible

 

Tener bajos niveles de gasolina puede resultar muy costoso, y no solo se trata de términos económicos sino también que constituye un alto riesgo para la seguridad del conductor y la carga. En este sentido, es importante tener el tanque lleno de combustible antes de salir —como mencionamos en el consejo anterior—, y surtir todo lo que sea posible cada vez que pases por una estación de servicio o grifo.

El tema del combustible también radica en que puede ser muy útil no solo para llegar a tu destino, sino también, para brindarte electricidad y calefacción en caso de que tengas que aparcar durante el camino.

 

  • Descansa 

 

Durante el viaje existen lugares destinados al descanso que siempre resultan beneficiosos para ti, tu seguridad y para que se enfríen los frenos del camión.

 

  • Verifica el camión

 

Además de todos los beneficios expuestos en el punto anterior, el momento del descanso puede servirte para volver a verificar el estado de tu camión: revisar el inflado de las llantas, percatarse de que no haya escapes por ningún lado y que los frenos estén funcionando correctamente. Así que, anímate a verificar tu vehículo, solo te tomará unos minutos y te brinda mayor seguridad al conducir. 

 

  • Conduce con prudencia

 

Primero que nada debes entender que las zonas montañosas no son el lugar apropiado para prácticas de carreras, así que, lo más recomendable en conducir con precaución, dejando todo el espacio posible entre tu camión y el vehículo que te antecede, de ser posible manejar a 8 km/h menos del límite de velocidad permitido en la zona, esto te permitirá tener más tiempo para evitar accidentes.

 

  • Utiliza los frenos debidamente

 

Usar los frenos incorrectamente es muy común cuando conduces cuesta abajo por zonas montañosas, puesto que, comúnmente el conductor busca reducir la marcha justo cuando se da cuenta de que el vehículo va muy rápido, lo que podría sobrecalentar y detener el motor, o en su defecto atascarse en neutro. 

En estos casos, debes mantenerte en el rango de velocidad segura. Por ejemplo: si la velocidad segura es de 50 km/h, deja que descienda el vehículo por sí solo hasta sobrepasar solo un poco de lo recomendado (segpun nuestro ejemplo podria ser 60km/h), en este punto, empieza a frenar paulatinamente hasta llegar a los 45 km/h.

 

  • Presta atención al clima

 

Las zonas montañosas son muy impredecibles en cuanto a los cambios climáticos, así pues, puedes estar viendo un brillante sol y de repente toparte con una espesa niebla que no te deja ver el camino, en estos casos, es importante que tomes aún más medidas de precaución durante la conducción y de ser necesario, deberás detenerte en una zona segura hasta que mejore el clima. 

 

  • Equípate de comida, agua y artículos de emergencia

 

Nunca se sabe qué pueda pasar durante un viaje por las zonas montañosas, así que es mejor estar prevenido con suficiente agua, comida no perecedera y artículos de emergencia y primeros auxilios, como un botiquín, linterna, mantas y conos. 

¡Hemos terminado! Estos fueron nuestros consejos para viajar por zonas montañosas, así que, conduce con mucha precaución y sé siempre un chofer prevenido y responsable.